Las piedras preciosas se han utilizado con fines terapéuticos y espirituales desde los primeros días, en todas las tradiciones. Usados adecuadamente, pueden contribuir y acelerar la curación mediante la práctica de la litoterapia, que utiliza gemas y minerales para restaurar las funciones enzimáticas, y pueden energizar el desarrollo espiritual. Las medicinas alternativas como la homeopatía han dado importancia al carácter terapéutico de ciertos minerales, pero apenas se ha propuesto el uso de piedras preciosas para ampliar la conciencia o establecer una conexión energética holística con la piedra misma. En esta recuperación de la sabiduría antigua, Florence Megemont explora las muchas dimensiones potentes y beneficiosas del mundo mineral.
Se inventarian más de setenta piedras preciosas y semipreciosas en cuanto a sus principales depósitos, aplicaciones terapéuticas y correspondencias zodiacales. Los lectores descubrirán qué minerales pueden aliviar trastornos físicos y emocionales específicos y qué piedras preciosas son indispensables para su salud espiritual.